Hasta hace unas semanas este era mi lugar de trabajo. Compartirás conmigo que levantarse cada mañana e ir a trabajar es algo que se hace un poquito "cuesta arriba", pero cuando tienes la suerte de entrar cada día por esa maravillosa fachada puede transformarse en un verdadero placer. Te propongo que me acompañes en este recorrido que he disfrutado durante unos meses...
Al entrar una amplia escalinata techada por esta magnífica bóveda nos lleva a la planta inferior del claustro
El conjunto tiene la belleza del equilibrio entre la austeridad de los arcos del claustro bajo y la ornamentación de los del claustro alto. La verticalidad de la impresionante y centenaria sequoia pone el contrapunto a las líneas horizontales que delimitan el espacio, alzándose hacia la luz como el conocimiento transmitido y generado entre estas paredes...
En el claustro bajo se encuentran las antiguas aulas dedicadas a las Escuelas Mayores. Esta lleva el nombre de Miguel de Unamuno, quien fuera rector comprometido en tiempos tan convulsos y difíciles para la libertad de pensamiento como aquellos del 36...
Seguimos recorriendo el claustro bajo y nuestros pasos resuenan en el silencio, como resonaron los pasos de tantos estudiantes y profesores ilustres a lo largo de los siglos.
Sobre uno de los laterales se alza la espadaña barroca de la capilla con el reloj y la campana que marcan el tiempo y convocan a los actos universitarios.
El aula de Fray Luis de León mantiene los antiguos pupitres desde los que los estudiantes escucharon aquel "Como decíamos ayer..." con que inició su primera clase tras años en las cárceles de la Inquisición
El Paraninfo acoge bajo sus abiertas y elegantes arcadas los actos más solemnes de la institución.
El recibidor de la puerta trasera -que abre hacia las catedrales- está techado con un magnífico artesonado de estilo árabe
La capilla, centro de los actos religiosos universitarios, está dedicada a San jerónimo
se accede a ella a través de grandes puertas de delicada talla
Los "vítor" inscritos en los muros responden a una vieja tradición universitaria. Cuando un estudiante conseguía el doctorado sus compañeros pintaban este anagrama con sangre de toro. También se han realizado para conmemorar visitas de personalidades o como homenaje a insignes antiguos alumnos. En las nuevas facultades se sigue manteniendo esta antigua tradición, aunque ya no es la sangre de toro el pigmento con que se pintan...
La piedra de la parte más alta de los muros, festoneada en relieves, enmarca las labores del artesonado polícromo
Ya hemos recorrido todo el claustro bajo y llegamos a la bellísima y airosa escalera que asciende al claustro alto
Delicados relieves de escenas -cotidianas unas y otras cargadas de simbolismo- trepan y se entrelazan en el interior y el exterior de la baranda, llenas de curiosos personajes y plantas y seres fantásticos...
y todo ello iluminado por el gran un gran ventanal que pone luces y sombras en las tallas y hace brillar el oro en los medallones que rematan las crucerías de la bóveda.
Al final de la escalera nos sorprende la perspectiva del claustro alto con sus hermosos arcos y artesonados
Un pórtico plateresco da entrada a la antigua biblioteca
El acceso al interior no está permitido, pero no es menor por ello la emoción de contemplar a través del cristal esa enorme sala alargada y semicircular en sus extremos que alberga en sus estantes tantísimos manuscritos, incunables y antiguas ediciones de obras clave del conocimiento y la literatura cuya consulta se reserva a los investigadores
Antiguos globos terráqueos reposan también en el silencio y la quietud ...
Desde uno de los ángulos del claustro alto la perspectiva de la Catedral Nueva y su imponente torre se recorta sobre el cielo
Expuestos en vitrinas, antiguos materiales didácticos, publicaciones e instrumentos científicos
Una puerta da acceso al coro de la capilla
Volvemos al claustro bajo. A través de este patio se accede a lo que fue la antigua casa donde residía el bedel y que ahora son dependencias administrativas de varios servicios universitarios.
Y esto es lo que se ve desde las ventanas del lugar donde he estado trabajando los últimos meses... la fachada del Nacimiento de la Catedral Nueva... ¡un verdadero privilegio!
recientemente nos hemos trasladado al edificio más reciente de la Universidad, dedicado a investigación y desarrollo, con un diseño funcional y escueto ... ha sido un cambio de "siglos" de un día para otro. ¡¡¡Supongo que entenderás mi añoranza de ese antiguo edificio y de mis paseos por sus claustros!!!
6 comentarios:
Pues tienes razon es precioso...Mas no se puede decir...
Saludos
Un reportaje excelente para conocer la belleza que encierra cada rincón
en esta hermosa ciudad.
Lo entiendo,Isabel, y lo añoro también, tengo esas imagenes,tan recientes.
Un abrazo y mucho ánimo.
Es un lugar especial, José Manuel, y también el entorno del barrio antiguo. La localización del nuevo edificio está muy cerca de mi casa y es cómodo, pero no tiene ese ambiente tan especial de la zona histórica...
Un abrazo
Gracias por tu visita y tu amable comentario, Teresa, me alegra que te haya gustado.
Saludos
Me encantó enseñároslo, Jesús. Seguro que hiciste estupendas fotos y me alegra que guardes tan buen recuerdo de un lugar que quiero tanto.
Un gran abrazo y gracias por esos ánimos...
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